Franklin Daniel Meza: 2009

La inspiración que para todas personas llega de diferentes formas, o inclusive, la llevan en su ser desde el momento en que nacen, para mi ha nacido en el momento en que tuve la oportunidad de detenerme a observar lo profundo de la creación de Dios, la magnificencia de las cosas existentes en nuestro mundo, que pueden ser captadas tanto al escuchar como al abrir bien nuestros ojos y observar en el mas mínimo espacio que nos rodea, la belleza encuadrada en un momento digno de ser perpetuado para contemplarlo, una y otra vez, digno de ser compartido con aquellos que siendo menos cuidadosos al ver nuestro entorno han perdido miles de momentos bellos para admirar y profundizar de lo pequeños que somos y complejos a su vez en expresión y composición por lo que no bastaría solo un vistazo. Pero no ha sido lo único que me ha inspirado para comprender esto y querer entrar en el bello mundo de la fotografía, existe un amigo digno de imitar, el que con su ejemplo y pasión acompañado de una inexplicable astucia para captar este tipo de momentos, situaciones y lugares, con ojo atento a lo que nadie, o no muchos se dan el tiempo de observar, con un punto de vista o mas bien un don dado por Dios, en el cual encuentra la belleza de todo resumido en una imagen, la cual esta listo para captar del mejor modo; este amigo y gran fotógrafo se llama Eny Roland, al cual agradezco su tiempo y el tomar en cuenta mi opinión.